Pelota Montessori Flores y mariposas
- Sku J048
La pelota Montessori es diferente a otros juguetes. Está confeccionada con materiales naturales y es blandita, ofreciendo al bebé una sensación agradable y suave al tacto, sin poder hacerse daño en ningún momento. Además, tiene un cascabel dentro, lo que estimula el oído de los pequeños con un sonido suave y tierno, haciendo que la pelota sea mucho más atractiva y llamativa. También, la forma de los gajos que forman la pelota es ergonómica, acorde al tamaño de los deditos del bebé. Este aspecto favorece la motricidad y el desarrollo de la curiosidad innata que poseen los más pequeños.
¿Cómo y cuándo utilizar la pelota Montessori?
Según la filosofía de María Montessori, los bebés necesitan elementos que inciten estímulos sencillos acordes a su desarrollo y que supongan objetivos alcanzables. De hecho, es recomendable tener en cuenta esto a la hora de ofrecer cualquier elemento de juego a nuestros pequeños.
La pelota es un gran compañero de entretenimiento y aprendizaje ya que se adapta a las necesidades del pequeño según su edad:
De 0 a 5 – 6 meses se aconseja colgarla a la mano del bebé en una zona diurna. Así, puede utilizarse como móvil táctil de manera que el bebé pueda tocarla, golpearla o acercársela, estimulando sus primeros movimientos de golpeo y agarre. Sea desarrollando el sentido del oído al escuchar su cascabel, el sentido de la vista mediante la visualización de sus colores llamativos o el sentido del tacto al acariciarla, es el acompañante perfecto en casa y en el paseo.
De 5 – 6 a 12 meses su utilización varía y ya no se la ofrecemos colgada. Es una buena idea atar entre las juntas de los gajos trozos de lazo de de diferentes larguras, texturas y colores. Así, además de desarrollar la motricidad gruesa, favorece el inicio de la motricidad fina mediante el tacto y la utilización del agarre en forma de pinza o pinza digital, que comienza alrededor del octavo/noveno mes.
Por otra parte, a esta edad fomenta el desplazamiento y el inicio del gateo, esencial en el desarrollo motor. Gracias a su forma, la pelota rueda poca distancia por lo que el bebé la considerará un objetivo alcanzable, lo que le motivará a acceder a ella sin sentirse frustrado. Además, su diseño ergonómico le ayudará a cogerla y agarrarla sin problema.
De 12 a 24 meses, en sus primeros pasos, podrá aventurarse a golpearla con los pies. Al no alejarse demasiado, le proporciona repetición y por consiguiente perfeccionamiento y desarrollo progresivo de su bipedestación.
Medida: 12 x 12 x 12 cm